Por más de dos años, Expedited Specialized Logistic (ESL) avanzó paso a paso hacia una meta: obtener la acreditación OEA (Operador Económico Autorizado).
Fue una tarea que tuvo auditorías, observaciones del Servicio de Administración Tributaria (SAT), reuniones entre áreas, procesos de cumplimiento y un esfuerzo constante para alinear toda la operación a los estándares de seguridad y trazabilidad que exige el comercio internacional.
El resultado llegó este año y no solo representa una validación técnica, sino una herramienta estratégica para el crecimiento de la empresa.
“Fue un proceso largo y complejo. Desde que iniciamos hasta que obtuvimos la acreditación, pasaron dos años”, explicó a T21 Ángel Hernández, director general de STI México y ESL.
Aunque nació como parte de STI, firma especializada inicialmente en servicios logísticos marítimos y aéreos, ESL ha crecido hasta consolidarse como un operador con identidad propia, comentó Hernández.
En los últimos años, la empresa incorporó operaciones de carga terrestre, incluyendo unidades de quinta rueda, y cuenta con su propia base de clientes.
En ese contexto, contar con la acreditación OEA era más que un objetivo: era una necesidad operativa.
“Muchos de nuestros clientes mueven mercancía hacia puertos o al extranjero. Para ellos, la seguridad en la cadena logística es una prioridad”, apuntó Hernández.
La acreditación OEA garantiza que la empresa cumple con los requisitos legales y fiscales exigidos por la autoridad mexicana (SAT); además, facilita beneficios como el uso de carriles FAST (vías rápidas en aduanas para empresas confiables), el reconocimiento por parte de otras autoridades aduaneras internacionales y mejores oportunidades con grandes corporativos, explicó.
Pero el camino no termina ahí. “Esta acreditación es una puerta importante que se abre para obtener la certificación CTPAT (Customs Trade Partnership Against Terrorism)”, adelantó Ángel Hernández.
Con esa meta en el horizonte, ESL busca fortalecer aún más su posicionamiento como operador confiable ante las autoridades estadounidenses, apuntando a consolidarse como una empresa expedita con estándares internacionales, subrayó el directivo.
De cara a la segunda mitad de 2025, ESL se enfocará en acelerar su crecimiento, especialmente en las divisiones de carga especializada y caja seca, explicó.
A pesar de pertenecer al Grupo STI, la compañía “mantiene un esfuerzo consciente por operar con estándares propios y cuidar el cumplimiento normativo, sin comprometer la reputación del grupo al que pertenece”, enfatizó Hernández.
El aprendizaje ha sido transversal. Desde el área de calidad hasta el personal de tráfico, todos formaron parte del proceso.
La acreditación fue posible “gracias al trabajo coordinado de un equipo especializado en seguridad y cumplimiento, que se encargó de alinear a todas las áreas operativas (desde calidad hasta tráfico y despacho) para asegurar que los procesos internos cumplieran con los requisitos exigidos por la autoridad”, de acuerdo con Hernández.
Hoy, con la acreditación OEA en mano, ESL se ubica en una mejor posición frente a la competencia, buscando una logística segura, trazable y preparada para los nuevos desafíos del comercio internacional, resaltó.