Sin considerar las crisis del 2009 y del 2020, se trata de la primera vez, desde que hay registro electrónico, en que México perfila una reducción de sus compras de mercancías del país asiático
Las importaciones mexicanas de productos originarios de China bajaron por primera vez en el periodo de enero a agosto de este año, desde 1993 -último año de registro en línea-, sin tomar en cuenta 2009 y 2020, cuando hubo crisis globales, según datos del Banco de México.
México importó mercancías chinas por un valor de 74,171 millones de dólares en los primeros ocho meses del año en curso, lo que supone una caída interanual de 6.7 por ciento.
China envía al mercado mexicano una amplia variedad de productos, desde teléfonos, computadoras y circuitos electrónicos integrados, hasta autos, semiconductores, transformadores eléctricos y láseres.
La fuerza comercial china se aprecia en su participación en el total de compras externas de México, que escaló de 15.7% en 2013 a 19.8% en 2022, considerando los periodos de enero a agosto de cada año. Pero esta cuota se redujo a 18.5% en 2023. Si bien la economía china ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos 30 años, el crecimiento ha sido desigual, tanto geográficamente como entre los diversos sectores de la economía.
A medida que la economía de la República Popular China se ha vinculado cada vez más con la economía global, China se ve afectada en varios aspectos por las crisis y recesiones de las principales economías del mundo.
Según el FMI, el impulso de crecimiento de China se está desvaneciendo luego de una oleada de reapertura por el Covid-19 a principios de 2023.
El crecimiento se desaceleró de 8.9% en el primer trimestre de 2023 (tasa trimestral anualizada desestacionalizada) a 4.0% en el segundo trimestre. Con una amplia capacidad ociosa económica y la caída de los precios de la energía y los alimentos, la inflación cayó a aproximadamente 0.2% (año tras año) en el segundo trimestre de 2023.
Además, el FMI señala que los indicadores de alta frecuencia sugieren una mayor debilidad, con la crisis del sector inmobiliario en el país liderando los factores que obstaculizan el crecimiento.
Respecto a la demanda local, el PIB preliminar de México registró un crecimiento anual de 3.3% durante el tercer trimestre de 2023, acumulando ocho trimestres consecutivos de crecimiento.
Las empresas que cotizan en México informaron sus resultados financieros del tercer trimestre de 2023, los cuales se vieron afectados por la apreciación del peso mexicano, dado su efecto negativo en los ingresos por exportaciones y ventas al exterior al convertirlos a moneda local, resultando en una disminución en las ventas y Ebitda de 1.5% y 1.2%, respectivamente, versus el tercer trimestre de 2022.
A su vez, el crecimiento de las exportaciones sigue siendo un importante motor del rápido crecimiento económico de China. Las elevadas tensiones comerciales entre China y sus socios comerciales, incluida la imposición de aranceles estadounidenses a ciertos productos y el aumento de la presión internacional relacionada con la política comercial china y las transferencias forzadas de tecnología, pueden tener un impacto sustancial en la economía china.
Fuente – El Economista