Comercio Exterior, Economia

NEARSHORING PASA DE LA TEORÍA A LA REALIDAD Y LLEVA RAUDALES DE INVERSIÓN A LA FRONTERA DE MÉXICO CON EE.UU.

Se proyecta que la Inversión Extranjera Directa alcance los 31 mil millones de dólares para fin de año

La pandemia de Covid-19 puso de relieve la dependencia de Estados Unidos de China para su cadena de suministro global. Esta gigantesca disrupción ocasionó una gran congestión portuaria en la costa oeste estadounidense y bloqueos en los puertos del país asiático. Esto sumado a la falta de stock de seguridad con los fabricantes estadounidenses, creó una explosión en las tarifas de flete marítimo, resume el reporte de Transport Intelligence (Ti) “Logistics Growth Opportunity on the US / Mexico Border”. Esta crisis- y poco antes- los aranceles a las importaciones chinas impuestos durante la administración de Donald Trump, reimpulsaron la idea del “nearshoring”; es decir, el traslado de la producción a países cercanos, con el fin de complacer la necesidad de cadenas de suministros más cortas y también más confiables desde un punto de vista geopolítico. Igualmente se expuso que México podría verse favorecido de consolidarse esta tendencia. Hoy ese planteo, según se desprende del reporte, dejó de ser una teoría para transformarse en una realidad.

Lo anterior se puede constatar en la frontera entre Estados Unidos y México, la que hoy luce muy diferente:

México es el socio comercial número uno de EE. UU.

Laredo, TX es la puerta de entrada internacional número uno de EE. UU.

Más de US$800 millones en bienes pasan diariamente por Laredo.

La inversión extranjera directa (IED) ha aumentado casi un 100% desde 2000, alcanzando un total de US$36.000 millones en 2023.

Raudales de inversión extranjera

La Inversión Extranjera Directa (IED) en México tiene una tendencia al alza con un aumento del 9% en el primer trimestre de 2024, equivalente a US$20 mil millones, en comparación con el mismo período de 2023, equivalente a US$18,6 mil millones. Este aumento está vinculado a reubicaciones y expansiones impulsadas por el nearshoring en regiones fronterizas clave como Monterrey, Juárez y Tijuana. Se proyecta que la IED alcance los 31 mil millones de dólares para fin de año (de los cuales el 57% ha provenido de Estados Unidos) y subraya el creciente atractivo de México como centro manufacturero, con Nuevo León, Jalisco y Puebla emergiendo como los principales estados para estas inversiones.

El aumento de la IED que fluye hacia México impulsa la economía del país y presenta oportunidades para el comercio transfronterizo. Retailers y fabricantes han invertido mucho, lo que ha provocado bajas tasas de desocupación y un aumento en los costos de alquiler de las instalaciones logísticas. Según Prologis, la demanda se ha duplicado desde 2019 y los analistas afirman que cada mil millones de dólares invertidos en fábricas de automóviles genera entre 5 y 10 millones de pies cuadrados de necesidades de almacenamiento. Además, el 40% del arrendamiento logístico en México en 2022 estuvo impulsado por actividades de nearshoring.

Nuevo León es particularmente popular entre los inversores extranjeros. Según el New York Times, las empresas chinas representaron el 30% de los 7.000 millones de dólares invertidos en el estado desde finales de 2021, sólo superadas por Estados Unidos, que totalizó el 47%.

Aunque la industria automotriz ha liderado el camino en la actividad de casi abastecimiento, otros sectores también están apuntando al mercado:

ZC Rubber construirá una nueva planta en Coahuila con un centro de distribución en Norteamérica.

Óptimas está desarrollando operaciones en Monterrey debido a sus vínculos con el sector automotriz estadounidense.

Tesla está estableciendo una fábrica en Monterrey (en la imagen) y ha instado a los proveedores de su planta de Shanghái a replicar el modelo de cadena de suministro en México.

Ningbo Tuopu Group Co., Shanghai Bayon Precision Automobile Component Co., Suzhou Dongshan Precision Manufacturing Co., Zhejiang Yinlun Machinery Co. y Chinaust Group también tienen planes.

Otros fabricantes interesados son BYD, Chery Automobile Co. y MG de SAIC Motor.

Tanto Lenovo como Engel también han abierto plantas en Monterrey.

Como era de esperar, expone el reporte, las empresas ferroviarias y de logística, no sólo estadounidense están aumentando sus inversiones en operaciones de transporte y almacenamiento para aprovechar los crecientes volúmenes transfronterizos.

Los sectores automotriz e industrial están impulsando el crecimiento de Ryder México que, para hacer frente a los volúmenes adicionales, abrió recientemente una segunda instalación transfronteriza de 50.000 pies cuadrados en El Paso, Texas.

Echo Global Logistics ha abierto instalaciones en Laredo y Monterrey, atendiendo a las solicitudes de los clientes para simplificar los servicios en ambos lados de la frontera.

Blue Grace Logístics ha establecido una oficina dedicada a servicios de carga transfronteriza y operaciones de almacenamiento subcontratadas en Guadalajara.

Redwood Logistics anunció que estaba invirtiendo en los sectores automotriz, farmacéutico, de alimentos y bebidas y comentó que sus clientes estaban acortando los plazos de entrega y diversificando sus cadenas de suministro fuera de China.

Maersk abrió una instalación de 322.900 pies cuadrados en el centro emergente de Tijuana, enfocada en los sectores de alta tecnología, automotriz, consumo y retail, llevando su capacidad a 1,6 millones de pies cuadrados en el país.

Otras empresas importantes que han invertido recientemente en capacidad operativa han sido CH Robinson y Arrive Logistics.

Se espera que la frontera mexicano-estadounidense continúe su transformación increíblemente lucrativa, impulsada por el nearshoring a medida que persiste el cambio de la globalización a la regionalización e impulsada por la IED, e, mejoramiento de la infraestructura y el Acuerdo entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC), que ha resultado en cadenas de suministro más eficientes y rentables.

Fuente – Mundo Marítimo